Desde Vones Gin os acercamos a uno de los bartenderes españoles de más renombre, Pedro Chicote, de quien podemos aventurarnos a decir que posee la categoría de mito en el mundo de la coctelería, donde se le conocía como “Perico Chicote”. Sin duda, el Bartender de referencia de nuestro país.
En la mayoría de los casos las leyendas se forjan desde el esfuerzo y la perseverancia. Este es el caso de Chicote. Nació en el seno de una familia humilde el 13 de mayo de 1899, por lo que pronto debió desterrar su infancia y comenzar a trabajar. A la temprana edad de 8 años era mozo de almacén en el “mercado de los Mostenses”, trabajo que llegó a compatibilizar repartiendo telegramas, lo que le sirvió para mantener a su madre y hermano (era huérfano de padre).
En 1916, con 17 años de edad es cuando nace un clásico de los bartenders españoles al entrar como ayudante de barman en el Hotel Ritz de Madrid. Esta experiencia le sirvió para empaparse de las claves de la barra del hotel, con el gran barman Pedro Sarralta, compaginando este trabajo con experiencias en los casinos de San Sebastián y Biarritz, durante los veranos sucesivos.
En los años siguientes formó parte de la plantilla del Savoy y del bar Pidoux, ambos en la gran vía madrileña, tras lo cual abrió su propio establecimiento en el mismo enclave estratégico. Corría el año 1931 y Chicote tenía 32 años cuando se inauguraba lo que se convertiría en un símbolo y referencia de la cultura madrileña durante el siglo XX, el Bar Chicote.
Toda la experiencia profesional de Chicote quedó recogida, afortunadamente, en los 6 libros que escribió: “El Bar Americano en España” (1927), “La ley mojada” (1930), “Mis 500 cocktails” (1933), “Vinos españoles y sus mezclas” (1942), “Cocktails mundiales” (1950) y “El bar en el mundo y pequeña historia de mi museo” (1961). Hay que destacar que Chicote dejó escritas más de 800 fórmulas de cócteles.
Cóctel Chicote
Uno de sus cócteles más conocidos es el “Cóctel Chicote”. Mezclamos en la coctelera hielo picado, tres cucharadas de café con Grand Marnier, media copa de vermut rojo y media copa de ginebra seca. Se agita todo muy bien y se sirve en copa de cóctel, añadiendo como toque final un twist de naranja. Estamos convencidos de que Pedro Chicote habría elegido la mejor ginebra del mundo, nuestra London Dry Gin, para elaborar el cóctel que bautizó con su apellido.
Museo Chicote
En 1947 se inaugura el “Museo Chicote” en la parte baja de su establecimiento de la Gran vía. Con los años, el nombre se extendería a todo el local. De esta forma Chicote quiso compartir otra de sus grandes pasiones, la colección de botellas que había iniciado en el año 1917, cuando el embajador de Brasil le regaló una botella de aguardiente de caña llamado Paraty, por participar en una recepción convidada en el Ritz. Una colección de más de 20.000 botellas provenientes de todo el mundo, y todas llenas.
En los años de la post guerra civil española, el establecimiento de Chicote se convirtió en un lugar de reunión de personalidades no solo españolas, sino también internacionales. Ernest Hemingway, Ava Gardner, Frank Sinatra, Lola Flores, Carmen Sevilla. La lista es infinita. Sirva de ejemplo de la importancia del Museo Chicote en la cultura de nuestro país las palabras dedicadas por Carmen Sevilla: “Era un hombre cariñosísimo, tierno y extrovertido. En el sótano se firmaban contratos de cine, se hacían recepciones, degustaciones… No era un museo de botellas, sino de personalidades”.
Durante una de sus visitas al establecimiento de Pedro Chicote, Sofia Loren quedó impresionada con una botella que emulaba sus facciones de forma perfecta, e insistió al ya famoso Bartender para que se la regalara. Con todo, Chicote no atendió la petición de la bella actriz y se mantuvo firme. No se la regaló. El diario italiano “Il Mattino” hizo eco de la anécdota con el siguiente titular: “Chicote ha dicho NO a la Loren”.
Chicote nos definía como debe ser un buen Barman en una entrevista concedida a la revista Esfera: “El buen barman tiene que conocer no sólo los vinos y licores de la tierra, sino sus mezclas y transformaciones; ha de dominar varios idiomas, será un buen psicólogo y tendrá una esmeradísima educación. Poseerá una conversación fácil y amena, habrá viajado mucho, conocerá grandes capitales, hoteles y casinos, será discreto y reservado…”
El destino quiso que Chicote falleciera el día de navidad, en el año 1977. Casualmente el mismo año y día que otro genio en su materia, Charles Chaplin. Su local pervive, en la Gran Vía madrileña, donde continúa sirviendo cócteles a sus clientes.